Cómo Trabajamos
Nutrición: eje del éxito
Está demostrado que muchas enfermedades se asocian a una mala alimentación y que mantener unos buenos hábitos dietéticos y de ejercicio preservan la salud a largo plazo, por tanto, en OBESTEA nuestro objetivo es contribuir a conseguir y mantener unos hábitos que preserven su salud.
Para ello, en nuestro tratamiento de la obesidad en Madrid, es imprescindible el trabajo conjunto del especialista en endocrinología, quien revisará su salud, y el de la dietista-nutricionista, que ofrecerá su ayuda en la planificación de la alimentación mediante un plan personalizado que contribuirá a la pérdida del exceso de peso que perjudica su salud.
Durante sus seguimientos, la Dietista-Nutricionista le guiará, le formará y le resolverá cualquier duda o inquietud que tenga sobre su alimentación.
En el mundo existen múltiples estilos de dieta, en la clínica de adelgazamiento OBESTEA, abogamos por la dieta mediterránea, la cual ha demostrado en estudios científicos su eficacia en la prevención de enfermedades cardiovasculares y tumorales. (Estudio PREDIMED). Sin embargo, le adaptamos y modificamos la pauta para que le sea lo más sencillo posible su seguimiento, garantizando así que los hábitos saludables generados y sus beneficios se mantengan en el tiempo.
Fármacos: ayuda clave
En OBESTEA creemos que un plan integral basado en el uso de fármacos asociado a cambios dietéticos y de estilo de vida ayuda de forma notable a ciertos pacientes con sobrepeso/obesidad que han fracasado en intentos previos.
Los fármacos para el tratamiento de la obesidad están indicados en personas con un índice de masa corporal (IMC) mayor de 27,5.
Actualmente, los fármacos más utilizados en el tratamiento de la obesidad, por la relación beneficio – riesgo, son los análogos del GLP1: liraglutide y semaglutide.
Su uso está contraindicado en el caso de alergia al principio activo o a alguno de los excipientes.
Los estudios realizados en animales han mostrado toxicidad para la reproducción y los datos en mujeres embarazadas son limitados, por lo tanto, no se debe utilizar semaglutida durante el embarazo y se debe interrumpir en caso de gestación.
Se recomienda interrumpir el tratamiento al menos 2 meses antes de un embarazo planeado.
Se debe usar con precaución en el caso de antecedentes de pancreatitis.
Ambos fármacos han demostrado eficacia en la pérdida de peso, siendo el efecto de semaglutide mayor que el de liraglutide.
En los estudios STEP para valorar la eficacia de semaglutide se han conseguido pérdidas de hasta un 16-18% de pérdida de peso en un año y de hasta un 10% en los primeros meses de tratamiento en los que se titula la dosis. Más del 60% pueden perder al menos un 15% de su exceso de peso en 1 año.
Los principales efectos secundarios son gastrointestinales: náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento, eructos, flatulencia, dolor, distensión abdominal, dispepsia, gastritis, reflujo gastroesofágico. La frecuencia e intensidad de estos son diferentes en cada persona.
Otros síntomas son más raros, como fatiga, mareo, disgeusia(mal sabor de boca) o algún caso de pancreatitis. Es raro que estos síntomas provoquen abandono del fármaco.
En caso de presentar problemas digestivos persistentes a pesar de suspender el fármaco, el paciente podría necesitar ser evaluado por nuestro equipo de especialistas de gastroenterología (GASTEA).
Estos fármacos son de administración inyectable, de forma diaria (liraglutide) o semanal (semaglutide).
Los ensayos clínicos han demostrado que el beneficio es mayor cuando se usan al menos durante 1 año y que es frecuente la reganancia de peso tras la suspensión de estos, pudiendo volver a ganar las dos terceras partes del peso perdido al año de su suspensión, mucho menor que la reganancia de peso tras la realización de una dieta.
Por ello, en OBESTEA realizamos un seguimiento tras la finalización en el caso de que se suspendan antes del año de tratamiento, con el fin de valorar cómo se adapta el paciente a su estilo de vida, y en caso de ser necesario por reganancia, indicar la pauta más recomendable.
No hay riesgo en prolongar el tratamiento con fármacos más de un año si es necesario.
¿Necesita un tratamiento de obesidad en Madrid?
Con OBESTEA dará un paso hacia una vida más saludable. Estamos comprometidos a proporcionarle las herramientas y el respaldo necesario en este viaje.